Tú escribiste
tu vida en mí,
tu vida en mí,
me guiaste hacia ti,
me
amaste sin medida.
Me
mostraste
la luz de tu mirada,
la luz de tu mirada,
la calidez de tus sueños
cayendo
sobre mi piel.
Me
enseñaste a verte
con
los ojos cerrados,
a
saber quién eras
y
me dejaste caminar por tu vida
como
si fuera la mía.
Tú soñaste
mis sueños
mis sueños
y
los escribiste cada noche
con tu boca en mi piel.
con tu boca en mi piel.
Me
llenaste de luz
y
en mi floreció la poesía.
Aún hoy cuando sueño
vuelvo a vivir
en otros sueños tus sueños.
vuelvo a vivir
en otros sueños tus sueños.
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